Jelly02
Homenaje tipo «Todo un libro en una sola foto» a XY XX de Fosi Vegue.

Un patio de vecinos con habitaciones donde acuden prostitutas con sus clientes, mientras el fotógrafo, oculto, observa desde la ventana de enfrente aquello que debe permanecer invisible. Temas como la prostitución o el porno se convierten en perniciosos cuando un sistema o una sociedad al servicio de ese sistema así lo identifican, y no existen sin un contexto legal que defina los límites de lo que es públicamente visible. El sexo pasa a convertirse en un modo de control.

Las cámaras actuales luchan por hacer desaparecer el ruido digital y aquí se explota al máximo. El aumento exagerado de la sensibilidad con el fin de hacer más claro el sujeto, no hace sino enturbiar y alterar el mensaje. El ruido abrumador es nuestro propio inconsciente, es el espacio mental  en el que el sexo actúa como catalizador de nuestros instintos, de nuestros deseos y contradicciones.

En mi caso el exceso de ruido, requerido eso sí por el guion, se convierte en la propia trama de la trasferencia y el negro de fondo con ruido de todas las páginas se trasforma en una cartulina de rojo chillón como la típica lamparita. La parte interesante, no plana, de la escena queda también reducida a un pequeño triángulo pero presenta una información menos explícita aunque más realista que en XY XX. El sexo queda reducido a un simple desnudo en penumbra y la escena es misteriosa y no fácil de comprender.